En los últimos años hemos presenciado una transformación sin precedentes en la conciencia global sobre la importancia de la sostenibilidad. Las iniciativas medioambientales han emergido como un potente motor para impulsar la transición hacia una energía más limpia, una industria más sostenible y hábitos más ecológicos.
En este contexto, la Unión Europea ha implementado un nuevo impuesto: el Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (CBAM). Una medida para poner precio al carbono emitido de los bienes intensivos que se importan en Europa.
¿Qué es el CBAM y cuáles son sus efectos?
El Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (CBAM) es un arancel que regula los precios de los materiales importados en función de sus emisiones de dióxido de carbono (CO2). Inicialmente se aplica a importaciones de bienes con alto grado de contaminación como: cemento, hierro y acero, aluminio, fertilizantes, electricidad e hidrógeno. Si las emisiones asociadas a la producción de estos materiales exceden las normas europeas, los importadores deben comprar certificados de emisiones al precio del CO2 de la Unión Europea.
En términos de impacto económico, la fijación de precios basada en el carbono puede estimular inversiones en innovación y modernización en el continente europeo, generando ventajas competitivas y beneficios económicos. Sin embargo existe preocupación acerca de la eficiencia de las empresas en el corto plazo ya que por ahora no es una práctica a nivel global. Las compañías que están en países con precios al carbono podrían perder oportunidades de negocio y cuota de mercado frente a competidores que no tienen que considerar los costes de la contaminación por carbono.
El actual período transitorio y la fase de registro
Actualmente nos encontramos en un periodo transitorio en la aplicación de este impuesto. Durante esta etapa, los importadores solo tienen que declarar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) incorporadas en los bienes que importan, sin realizar ningún pago o ajuste financiero. Además deberán registrarse en el registro de importadores de la base de datos de la UE como operador declarante. Link para la suscripción aquí. El propósito de este período de transición es servir como fase piloto para todos los intervinientes, incluidos los importadores, productores y administración.
Una vez que el sistema definitivo entre en vigor el 1 de enero de 2026, los importadores deberán declarar cada año la cantidad de bienes importados en la UE en el año anterior y sus GEI incorporados. Al mismo tiempo, tendrán que entregar los certificados CBAM previamente adquiridos a las autoridades. Un método de gran impacto para que las empresas apuesten por un sistema de producción y transporte más sostenible.
Dada la implicación de la cadena de suministro en este ámbito, Operinter, operador logístico integral comprometido con la sostenibilidad en el transporte, ha detallado fase por fase y término por término las características y aplicaciones de este nuevo arancel en el sector logístico. Puedes consultar el video didáctico aquí: